Uno de los principales problemas del Perú es la brecha de pobreza material, exclusión social y desigual que tiene el Perú, así como la brecha de empleo digno y de acceso a oportunidades de mercado. Asimismo otro problema grave es la exposición de amplios sectores de población al riesgo, ya sea por fenómenos naturales y/o por la degradación ambiental. Si bien la situación ha ido evolucionando y mejorando, estos problemas siguen siendo álgidos a pesar del crecimiento económico.
Pero a la vez se reconoce también desde la MCLCP que tenemos un problema de eficacia, eficiencia de la política pública para enfrentar y resolver las brechas y los problemas existentes. En ese sentido un problema importante a enfrentar es que la oferta de servicios no responde a la demanda social.
Promover la participación de la población en situación de pobreza como actor, sujeto activo del proceso, de la mano con la necesidad de vincular los derechos a planes, políticas, presupuestos, y su expresión en metas físicas y financieras. Esto es lo que hará posible, a partir del seguimiento concertado a su cumplimiento, lograr resultados en la realización de estos derechos.
En la Mesa de Concertación se parte del señalamiento que, para enfrentar la pobreza, es necesario reconocer el país que somos, y los problemas que enfrentamos. La respuesta que promueve la Mesa frente a la pobreza, tiene como su eje central la concertación de propuestas, que debe expresarse en compromisos concretos a lograr, y el seguimiento concertado a la gestión pública, que busca garantizar su cumplimiento. Es decir, la respuesta combina un Enfoque de Derechos y un Enfoque en Resultados. Ello permite:
- Dar consistencia a la acción del Estado al asociar: derechos, políticas, planes, presupuestos, ejecución, seguimiento y permitir el seguimiento en el tiempo de la intervenciones.
- Fortalecer la cultura de transparencia rendición de cuentas y evaluación en la gestión pública.
- Mejorar la eficacia eficiencia y efectividad de la política pública
- Legitimar la participación de la sociedad civil en la gestión pública.
- Contribuir al desarrollo y empoderamiento ciudadano.
- Contribuir a potenciar el uso y acceso a la información pública.
- Contribuir a mejorar la calidad de la información para la toma de decisiones.
- Generar compromisos comunes entre operadores políticos, técnicos y sociedad civil organizada. Lo que a su vez contribuye a la sostenibilidad de las políticas en el tiempo.