Los contagios de Covid-19 en nuestra región vienen creciendo lenta pero sostenidamente. A la fecha se registra 237 casos distribuidos en nuestras 7 provincias, a los cuales se suman 3 fallecidos. Igualmente preocupa la situación de salud de los y las apurimeños/as afectados por diversos males, que en el marco de priorizar la lucha contra la pandemia, se han visto obligados a implementar estrategias de trabajo remoto.
Hasta el momento el comportamiento biológico del virus en los andes nos ha favorecido. No vivimos la tensa y dramática situación que enfrenta el norte y oriente peruano. No obstante, como bien señalan los científicos, de que “al virus apenas lo estamos conociendo”, nos obliga a no confiarnos, por el contrario seguir trabajando estrategias de prevención en los andes y más concretamente en nuestra región Apurímac.
Hacer frente a esta pandemia requiere la unión, diálogo y consenso del Estado, los actores privados y por supuesto del conjunto de la sociedad civil. En ese marco, nos preocupa la situación que se viene dando entre nuestro Gobierno Regional, nuestra Dirección Regional de Salud de Apurímac - DIRESA y nuestro hospital Diospi Suyana, una institución solidaria que después de conocer los impactos y necesidades de los más humildes en el marco de la violencia política, se instaló en Curahuasi hace más de una década.
Entendiendo que ambos sectores han tenido sus razones que permitieron o no avanzar con el acuerdo de mutua colaboración para hacer frente a la pandemia, hecho que fue saludado y celebrado por la opinión pública regional y del sur andino, desde la Mesa de Concertación para la Lucha Contra la Pobreza de Apurímac, queremos animarlos y convocarlos a la necesidad de dialogar, consensuar y retomar los caminos andados para hacer frente a la pandemia teniendo como horizonte el bien común.
Sabemos que los acontecimientos de los últimos días han podido acentuar la situación. En ese marco, apelando a la voluntad de servicio de ambas partes llamamos a ambos sectores a posibilitar un nuevo dialogo que reencamine los acuerdos que nos permita encarar la mayor amenaza viral de la historia de nuestra República que ya viene cobrando miles de muertos en nuestro país.
Seguramente no será sencillo. Pero si consideramos la responsabilidad social que tienen el Estado de garantizar el derecho a la vida, y la voluntad de servicio mostrada siempre por el Hospital Diospi Suyana, reconocida por las miles de personas ya atendidas, reiteramos la necesidad de volver a dialogar, consensuar y concertar por la salud de los y las apurimeños y peruanos.